20220329

Que la invasión Rusa en Ucrania iba a ir a acompañada de una ciberofensiva, nos lo podíamos imaginar. Pero esta vez, se producen sospechosos ataques a los satélites del operador Viasat, con poco o ningún miramiento con los efectos que causa también en el resto de países Europeos. ¿Está el gobierno Ruso detrás de ellos?

“Almost a month after the attack, the disruptions continue. Thousands still remain offline across Europe—around 2,000 wind turbines are still disconnected in Germany—and companies are racing to replace broken modems or fix connections with updates. Multiple intelligence agencies, including those in the US and Europe, are also investigating the attack. The Viasat hack is arguably the largest publicly known cyberattack to take place since Russia invaded Ukraine, and it stands out for its impact beyond Ukraine’s borders. But questions about the details of the attack, its purpose, and who carried it out remain—although experts have their suspicions.”

¿Os acordáis de Clubhouse? Si no es así, normal: creo que todos hemos olvidado la red social que supuestamente iba a revolucionar el sector allá por 2020, en los primeros meses del confinamiento. El caso es que hasta Putin y el gobierno Ruso parecen haberse olvidado de ella, y aunque las autoridades rusas bloquean y censuran Instagram, Facebook, o Twitter, Clubhouse se está convirtiendo en un refugio de expresión para los ciudadanos rusos que se oponen a Putin y a la guerra.

Al menos, por ahora: “But it might not last long. “The powers that be will crack down on all channels of communication sooner or later,” says Yablokov. “I’d argue that these free expressions of ideas will soon be stopped because of snitches and self-censorship. The Kremlin will clearly try to silence all voices.”

Tenemos por todas partes artículos especulando sobre las posibles razones que han llevado a Putin a la conclusión de que cometer estas atrocidades es una buena idea. En este artículo se apunta a un factor menos comentado: en un escenario de decrecimiento energético y de escasez de recursos, muchos gobiernos y mercados adictos al crecimiento saben que no va a haber suficiente para todos, y estarán dispuestos a cualquier cosa antes de abandonar su ritmo de consumo desenfrenado.

“La guerra de Ucrania no es la última: es la primera de la Era del Descenso Energético, la que marca el punto de ruptura. Un descenso que, como no hagamos algo rápido y coordinado, será a codazos, pisándose unos países a los otros por la falta de honestidad de unos Gobiernos que se resisten a reconocer que hemos chocado contra los límites biofísicos del planeta. En este descenso energético caótico y desordenado, siempre habrá una guerra en alguna Ucrania, ya sea en Europa, Sudamérica, Asia o África. Ahora mismo hay 17 guerras más activas, además de la que ocupa las portadas del primer mundo, que a veces parece la antesala del último.”

Una de las posibles explicaciones a la incógnita científica de la materia oscura es la existencia de un “anti-universo”, una dimensión espejo a la nuestra donde la entropía esté invertida y el tiempo discurra al revés. Esperemos, al menos, que en ese anti-universo no hagan tantas barbaridades como las que estamos haciendo en este.

“The theory behind the study, set to be published in the journal Annals of Physics, relies on what physicists call the three fundamental symmetries in nature. In the Standard Model of Particle Physics, they are: charge, because flipping the charge of a particle in a given interaction results in an equal and opposite charge; parity, because the mirror image of a particle interaction will look the same as the original; and time, because interactions that run backwards in time look the same as their original.”

“These three fundamental symmetries, the scientists say, suggest the existence of a mirror universe that would be the exact opposite of ours, meaning it would be filled with oppositely charged and mirrored particles that are going backwards in time.”

Y recordemos también que en Enano Rojo ya se hablaba de esto.

Estas ultimas semanas no han sido nada buenas para la PR de Google. Además de articulos que detallan las penosas condiciones de trabajo del personal encargado de oir y transcribir mensajes de voz para Google Home, también se descubre que Google ha estado capturando metadatos de las aplicaciones de llamada y SMS en teléfonos Android sin conocimiento ni consentimiento de los usuarios (lo cual es contrario a la legislación europea).

Como se comenta en esta columna de opinión, muchos llevamos deseando que Facebook desaparezca (o que, al menos, no tenga un papel tan decisivo en nuestro día a día). El caso es que algo que parecía imposible, poco a poco va tomando más carices de realidad. Algunas señales de ello son el decremiento en usuarios, la mala prensa, el aumento de la regulación (bien), y las dificultades que encuentra la corporación para seguir contratando talento.

“For 15 years, I’ve been waiting for Facebook to suffer the fate of every network-effects-driven success story – to experience the precipitous decline that is triggered by people leaving the service and taking the value they brought to it with them. Facebook now has to somehow retain users who are fed up to the eyeballs with its never-ending failures and scandals, while funding a pivot to VR, while fending off overlapping salvoes of global regulatory challenges to its business model, while paying a massive wage premium to attract and retain the workers that it needs to make any of this happen. All that, amid an exodus of its most valuable users and a frontal regulatory assault on its ability to extract revenues from those users’ online activities.”

Las Fallas son una celebración llena de arte, y no solo del arte tradicional. La performance “narrativa” que llevaron a cabo en la Falla Corona, iniciada en 2021, es una buena muestra de ello.

Y una obra maestra de arte es lo que me parece el nuevo álbum de Kavinsky (el primero después de un hiato de casi 9 años).  Petróleo puro en cada pista. Una de mis favoritas (por el momento), es este “Trigger”.