20211216

Parece increíble, pero ha sucedido: con alerta por tornado desde hacía horas, Amazon hizo asistir a todos los trabajadores del turno correspondiente (¡lo cual incluye repartidores y conductores!). Cuando prácticamente tuvieron el huracán encima, les dijeron que se “refugiaran” en los lavabos, ya que la fábrica no tenia otras instalaciones adecuadas para ello. El resultado: 6 trabajadores muertos.

En una fábrica de velas de Kentucky, las mismas prácticas y todavía más víctimas. Lo que estas desgracias dejan en evidencia es algo terrible: para estas empresas, antes tener empleados muertos, que tener empleados sin producir.

También al respecto de la cultura económica de USA, resulta muy revelador ver cómo desde allí (un país sin servicios públicos básicos como sanidad o educación) pueden llegar a percibir como mucho más “pobres” a los ciudadanos daneses, que cuentan con un fuerte estado del bienestar, servicios públicos, pensiones, y mejores derechos laborales.

“Every time one of those “$200,000 is not a lot of money” articles drops, if you look closely at it, what you’ll almost always find is a detailed budget of someone who is currently shouldering a lot of expenses or savings that would be smoothed out by a tax-funded welfare state in other countries. So the budgets will usually be dealing with one or two childcare bills while also putting significant savings towards 401k retirement accounts and 529 college savings accounts.” 

“Megan McArdle’s second tweet is particularly amusing because it begins by complaining that Danes have smaller homes on average, but then pivots to saying that the 421 hours of extra leisure time that Danish workers have each year should be disregarded because they have to use it to clean their houses instead of hiring maids. If only there was a way to work fewer hours and spend less time cleaning your house, perhaps by having a smaller house…like Danes have?”

Muchos todavía perciben el acoso virtual realizado contra mujeres como algo “inferior” al acoso físico en el mundo real, cuando tiene las mismas consecuencias. Entre estos “muchos”, me temo que también están las propias plataformas sociales:

“En su investigación, Spring contactó con Twitter, Instagram y Facebook. “Sus respuestas insistían en que están comprometidos con combatir el abuso online contra las mujeres”, pero a efectos prácticos, esto no se materializa. De hecho, el algoritmo fomenta y saca rédito de la difusión de estos contenidos. “Hice otro experimento creado una cuenta falsa de troll basándome en los perfiles que me habían acosado”, cuenta la periodista. “Esta cuenta no dejaba comentarios de odio, simplemente seguía las cuentas y recomendaciones que a partir de esos perfiles, Facebook me hacía. Al cabo de unas semanas, mi troll falso, Barry, recibía cada vez más y más sugerencias de contenido misógino, entre ello, páginas que hacen chistes sobre violar a mujeres. No solo no estaban frenando el consumo sino que lo estaban promoviendo para sacar beneficio con la publicidad insertada en esos vídeos”.

Relacionado con el acoso online y sus consecuencias, pienso también en la desgracia de Verónica Forqué y el posible papel que tuviera en su suicidio la cantidad de hate comments vertidos redes sociales durante su paso por Masterchef.

No soy muy fan de los talent shows, y he visto muy poco de Masterchef porque siempre me ha parecido un programa que fomentaba el bullying a los participantes. Aunque he leido que en el caso de Forqué los jueces se “portaron mejor” porque eran conscientes de sus problemas de salud mental, creo que hemos normalizado los supuestos “gurús” que son hirientes, desconsiderados, o humillan a otras personas, como si ese comportamiento demostrara su competencia en su ámbito. Y, la verdad, no tiene nada que ver:

“Si buscamos en Internet los momentos estelares de estos talent shows, suelen agruparse en dos categorías. Una es la de los más duros o incómodos, en los que el jurado pone a caldo a los concursantes (encontramos en estos momentos el mismo placer morboso que viendo a los militares totalitarios de películas como El sargento de hierro o La chaqueta metálica, aunque en este caso sin atisbo de crítica). “Lo que se muestra en los talents son relaciones muy desiguales, donde el que tiene el poder muchas veces humilla al otro, son espacios parecidos a las antiguas escuelas donde se aprendía a través de la férrea obediencia y la reprimenda”, dice la psicóloga Zapico.”

Si no habéis probado Wombo Dreams, el modelo de IA que pinta lo que le digas (con resultados extraños y surrealistas, pero sorprendentemente verosímiles), ya estáis tardando.

Si me he sumergido en algún “boom” este año, creo que ha sido el casi inabarcable Renacimiento que están viviendo los juegos de rol independientes y autoeditados. En esta recopilación, algunos de los más destacados (un par de ellos, ARC y Wanderhome, llegarán en 2022 publicados en castellano via Colmena de Papel y Cursed Ink).

Y para hacer la última recomendación musical del año, el nuevo single de Bonobo no me puede parecer más acertado. Esto es un adelanto: el nuevo album llegará al principio de este nuevo año 2022.

Con esto, 20 minutos en el futuro se pone en modo vacaciones por navidad. Felices Fiestas y  ¡nos vemos en 2022!